sábado, 4 de septiembre de 2010

Primera, segunda semana, tercer semestre.

Primero: Una disculpa si mi ausencia molestó; no era mi intención, pero finalmente mi falta de práctica para escribir semanarios se hizo presente, por eso no volveré a hacer semanarios.


Segundo: Pretendo seguir escribiendo con cierta continuidad periódica, espero que pueda cumplir con eso, ya no como una pretensión sino como una necesidad. Necesito también recuperar el viejo hábito de la lectura, lo sustituí por el de los videojuegos. Este último me ha dejado muchas satisfacciones, pero también me enseñó que es muy absorbente.


Por ahora estoy tratando de leer la serie de: “La materia obscura” de Philip Pullman. Voy en el primer libro.


Tercero: Primera semana (no es en el mismo contexto de las entradas anteriores): cumplí el capricho que me propuse, toda una hazaña para mí, sólo iré a la escuela lunes, martes y miércoles; mi fin de semana será ahora de cuatro días, ¡qué felicidad!.


Éste es mi horario:


Lunes: Héctor Ponce “Ciencia, Sociedad y Arte” 8-12pm

José Outón “Presentación y Difusión de la Obra” 12-3pm

José Outón “Análisis de la Imagen” 3-6pm


El día más cansado.


Martes: Ivonne Velasco “Pensamiento Filosófico y Arte” 8-11pm

Gregory Max Berger “Construcción Audiovisual” 11-4pm


El más divertido.


Miércoles: Edna Pallares “Planos y Perspectivas” 8-4pm


El más relajado hasta ahora.


Sin más por el momento nos leemos hasta la próxima entrega. :P

lunes, 19 de abril de 2010

Primera, segunda semana de vacaciones de “Semana Santa”, segundo semestre.

Lunes: Mi mamá se fue temprano y sin avisar, se llevó a la Chiquita con ella. El domingo se quedaron a dormir porque se les hizo tarde para regresar a Chilpancingo, así que mejor optaron por quedarse y ver a “Preciosa” desde el proyector. Tenía rato que no había visto a mi mamá tan contenta y emocionada por una película. Se preguntarán ustedes: ¿Cómo me doy cuenta de que así lo está? Pues sólo basta con notar ciertas características que hace después de la función y son: salir de la habitación o sala bailando de forma muy peculiar (como niña), sin pena por lo que los demás vayan a decir. Inmediatamente después de ver ese baile pregunto lo obvio, sólo para confirmar mi hipótesis: ¿Te gustó la película? Las respuestas de mi mamá varían, pero la que más extraño -ya que me remite a mi infancia, cuando nos daba por ver películas a ella, mi hermana y a mí (en mi antiguo y tan extrañado triángulo)- son: “Está pa' talleres” que significaba: Que si mi mamá diera algún taller algún día sobre algún tema en específico pondría esa película. Mi mamá es maestra, tiene la ya tan extraña y no valorada vocación de la enseñanza. En su vida ha dado clases de todo tipo, desde cosmetología hasta metafísica. Es una maestra un poco imperativa, pero llena de una pedagogía tan mundana y coloquial.


Mientras, con Ariel ya no fui a clases de waterpolo; preferimos nadar solamente y nadé 900 metros. ¡Buen comienzo!.


Jueves de la segunda semana: Fuimos mi hermana y yo con Su y con Omar al bar de la hermana de Su. Fue una noche interesante llena de una conversación fluida y amena sobre astrología entre otras cosas. Las palabras fueron saliendo de nuestras bocas mientras las cervezas hacían lo opuesto. Terminamos mi hermana y yo completamente ebrios. Omar se fue temprano y Su nunca tomó ¬¬. Llegué a mi casa después de dejar a mi hermana en la suya. Cuando ya iba en la esquina me di cuenta que no traía las llaves, así qué toqué el timbre. Ariel salió a abrirme la puerta enojado, entré como pude, tropezándome con las perras. Desafortunadamente todo acabó con una vomitada a un lado de la cama y una regañada de dos días.

domingo, 28 de marzo de 2010

Octava, novena semana, segundo semestre. (O lo que es lo mismo dos semanas antes de semana santa).

Recibí serias críticas de mis seguidores (en especial de Fred [Alfredo]) sobre la calidad del contenido de mis textos. Por eso ahora aprovecho estas semanas para contar algo que pasó en la cuarta y quinta semana de la última entrega. También aparte haré otro “mal” resumen de la octava y novena.

Cuarta o Quinta (How knows? [Fred does]): Alfredo y Gonzalo se hicieron “novios”, (espero que las comillas no molesten, también) en palabras más coloquiales: “se truenan el ejotito” “se machacan las piñas” “se cachan el granizo” “se toman su arroz con popote” “se muerden la almohada” “se soplan la nuca” “se maquillan”; pero sobre todo se quieren y desafortunadamente uno más que el otro (como sucede en la mayoría de todas las relaciones [ya lo había dicho Andréi Tarkovski en “El Sacrificio” y Carrie Bradshaw en “Sex and the City”]).

Yo fui el “celestino” de esa relación, ambos (astrológicamente) son opuestos entre sí. Alfredo (Sagitario) y Gonzalo (Géminis) viven esa fantástica e intensa forma de llevar esa relación uno fuego el otro aire opuestos pero a la vez complementarios: llenos de química y de conflictos por nimiedades; se aman a su modo y en su justa necesidad.

También en las semanas pasadas entregamos (el colectivo con título en proceso) un video-arte que en palabras de Larisa Escobedo: “está de poca madre” mi ego se desbordó por momentos de mi recipiente, me sentí poderoso, inteligente, creativo, propositivo y por la cara que vi en mis amigos y compañeros del colectivo también sintieron, si no todo, algo más que eso.

Ya que tengamos la página del colectivo lo pondremos en ella para futuras referencias.

Ahora sí, octava y novena: ¡Y pues nada! (citando a Maru Rabadán). Fuimos regañados por Larisa por que no vimos “bien” una película que nos puso en la octava semana así que en la novena nos hizo un examen sorpresa :S.

¿Qué más?

Fui regañado también por mis vértices por fumar mariguana en casa con Alfredo y Gonzalo.
También Adriana (la dentista) me arregló la muela (le puso resina).
Posiblemente el lunes vaya a clases de Waterpolo con Ariel.
Me encantó Nine, en especial Marion Cotillard.
Y hoy, domingo, va a llegar mi mamá a ver ya sólo a la Chiquita, porque Reynita se perdió.

lunes, 15 de marzo de 2010

Tercera, cuarta, quinta, sexta, séptima semana, segundo semestre.


Haré un “mal” resumen de todas estas semanas. Estoy muy retrasado y definitivamente he perdido por completo la noción de todo lo que ha pasado con exactitud así que voy a tratar de poner todos los acontecimiento principales.


Tercera: Recuerdo que fue la semana junky por primera vez fumé marihuana con mis amigos, fue una experiencia muy interesante, pero principalmente muy divertida. Como les había mencionado en una anterior entrega, tenía ya varios años de abstinencia, y con ello también varios años de no disfrutar de una convivencia pacheca. Ver a todos mis amigos en ese estado fue toda una experiencia intima tratarnos y conocernos en esa vulnerabilidad abrió (creo, desde mi punto de vista) una confianza más profunda en nuestras relaciones. Extrañamente nos disfrutábamos unos a otros, nos reíamos, nos analizábamos, y poco a poco casi nunca sin externarlo, nos queríamos.


Esa misma semana fui con Alex y Ariel al cumpleaños de mi hermana a Chilpancingo. Fue muy extraño. Al llegar a mi antigua casa sentí un vacío emocional aterrador, “mi casa, ya no era mi casa; mi familia, ya no era mi familia”. Todo lo que había dejado al venirme a Cuernavaca para vivir con mis vértices ya no existía y lo sufría. Traté de no estar mucho tiempo ahí y preferí terminar con el compromiso de ir a festejar a mí hermana y fuimos a su bar favorito hasta ese entonces, creo. Cenamos, yo sólo me tomé una cerveza, reímos un rato con Scarlett y Paco León y nos regresamos a Cuernavaca a descansar de un viaje de “entrada por salida”.


Cuarta: No recuerdo nada interesante en esa semana.


Quinta: Tampoco.


Sexta: Hmmm. El Martes de esa semana hicimos una instalación con Paco Lastra; el tema que decidimos fue: “El sabor del verde”. La instalación consistía en poner sobre el suelo un metro cuadrado de pasto, sobre eso una tablita de madera, y sobre ésta una jícara de calabaza y un churro de marihuana. Dentro de la jícara estaba una una bebida hecha a base de té verde con leche y un toque de vainilla. El churro estaba forjado sobre una sábana de papel arroz sabor vainilla también.


Lo que quisimos dar a entender en ese trabajo fue, en palabras de Gonzalo:



El propósito de esta instalación es evocar los sentidos en un ritual como es tomar el té. Es entrar en contacto con nuestras emociones y remitirnos a nuestra esencia, al contacto sincero a través de lo orgánico. Es la valoración de la madre tierra, fundirnos en ella con la hierba como intermediario y expulsar el cúmulo de emociones que en nosotros provoca. Es recordarnos a nosotros mismos que no hace falta nada más. Es disfrutar y fluir como parte de un todo, en un momento mágico”.



Domingo: Mi “hermanitón” llega a Cuernavaca.

Entre Alex, Ariel, Gonzalo, Alfredo y yo, con otras personas, le ayudamos a instalarse a mi hermana en lo que será su nuevo cuarto. Pese a la mala expectativa que tenía mi hermana sobre su nueva habitación (en cuanto al tamaño de ella y si sus muebles iban a caber) finalmente al final del día noté una sonrisa en su cara. Llegó con su gato “Satín” y su gata “Acapulco”.

Séptima: Semana completamente sobria en todos los sentidos. Principalmente llena de trabajo y negociaciones. El “colectivo” va a hacer la página del restaurante de Lastra en el cual, mi hermana (Dorina) ya trabaja. También tenemos ya casi terminado el rediseño de la página de www.cuernavacagay.com. Teníamos planeado hacer promoción turística en Taxco el sábado pero, después de un accidente con el carro y el genial concierto de Fangoria, no nos quedaron ni energía, ni tiempo para ir a hacerla. Alex, Ariel y yo nos preferimos quedar a llevar a componer el coche y a recibir a mi mamá que nos traía dos perritas a encargar por algunos meses: “Reyna Celeste” y “Chiquita Mendiola”.

lunes, 22 de febrero de 2010

Segunda semana, segundo semestre.

Siento ya tan lejana esta historia que puede que pierda veracidad, una disculpa adelantada por la falta de fidelidad que pudiera tener este texto. Por cierto, estoy por empezar la quinta semana y todavía no tengo la tercera ni la cuarta escritas.


Lunes: No hubo clases. Next.


Martes: No fue Maru (sabrán el por qué en la cuarta semana). Lastra nos dejó pensar en cómo podíamos comunicar a unos extraterrestres las tragedias que sufrimos en el planeta. (La solución la sabrán en la tercera semana).


Miércoles: Frustración por el dibujo. Larisa nos ha dejado una serie de ejercicios en los que tenemos que dibujar muchas cosas. La verdad, de todas las artes, es la que menos disfruto: tengo algo atorado con eso. Hace un semestre (del cual todavía no me atrevo a escribir) no vivía esta situación y el hecho de que ahora la sufra me hace sentir un poco de impotencia; pensar que el plomo y el granito del que están hechos los lápices son mi elemento zodiacal, y que cuando era chiquito con lo que más disfrutaba escribir era con ellos... todavía, hasta hace algunos años, decidí cambiar el lápiz por la tinta en una acción psicomágica por intentar darle más firmeza a mis palabras y a mis acciones. Ahora sólo crea una perenne ironía de esta situación.


Jueves: No pude llegar con Bermúdez porque amaneció lloviendo: fue el día de la lluvia eterna. Ariel me fue a dejar a la escuela para que no me mojara tanto (era imposible tomar un camión sin llegar mojado a tu destino). Llegué pensando que mi clase empezaba a las 12pm así que tuve que esperar más de una hora con un malnacido frío que me acosaba por mi espalda mojada. Por fín llegó Araceli, quien nos dio la primera clase a los pocos compañeros presentes, y después nos dejó ir temprano.


Caminando por los pasillos de la escuela me encontré a Gonzalo con quien ya había quedado de ir a mi casa saliendo de clases. Por una extraña razón nos encontramos a unos compañeros (que omitiré sus nombres hasta que tengan una relevancia importante en la historia) Así que aproveché para decirle a Gonzalo que los invitara a mi casa y así conseguir el Flower Power que buscábamos desde la semana pasada. Uno no quiso ir, dijo que tenía cosas que hacer pero el otro (eran dos desde un principio [por si se me olvidó acotar]) sí nos acompañó. El que se quedó nos consiguió las Florecitas. La ambientación de toda este día era lluvia, mucha lluvia, y fría.


Conseguimos lo que queríamos y nos fuimos a mi casa decididos a fumar. Cuando llegamos Ariel me habló por teléfono y me dijo que Alex ya venía para la casa, así que se nos sebó la idea de hacerlo y preferí posponerlo para un siguiente día. Preferí pedir una Pizza y enseñarles a Gonzalo y al compañero el concierto de Fangoria.


Sábado: Día de Saturno, mi Padre. Este día decidí fumar después de casi 3 años de abstinencia. ¡Qué mejor día! Después de discutir un rato con Ariel sobre mi decisión a hacerlo, me preparé un porro y también psicológicamente para hacerlo me subí a fumar a la azotea con un poco de culpa.

¡Qué rico! (parafraseando a Susi), sentí como lentamente llegaba el efecto. Pero no sólo eso, también vi a los cotorritos verdes (de los que tanto me hablaba Ariel [Él sabía que cruzaban el cielo a determinadas horas y me lo decía, pero yo aún así nunca los había visto]), cruzaban el cielo en dos parvadas una de seis y otra de tres cuando vi esa dije: esos somos Alex, Ariel y yo. Y me puse a escribir en el techo de la azotea con la punta de un clavo: Alex y Ariel, todos los aman, pero los ama más mi alma y cuerpo que les grita: vida. Los ladridos de un perro me sacaron de mi ensimismamiento, ¿lo dije bien? (parafraseando a La Veros Castro), era La Chicles y el Soliloquio que se ladraban (de un lado a otro de la reja de la imprenta) extrañándose. Traté desde la azotea de calmar a La Chicles y sí, efectivamente funcionó, pero también en ese preciso momento estaba por empezar Dynamis así que sólo le dije que iba a tratar de hacer algo al respecto y que mientras se calmara.


Llegué todavía con el olor de humo adornando mi culpa a acostarme en el piso a jugar Dynamis. Aquí fue cuando sentí que se me había olvido muchas de las cosas que se sienten cuando consumes “el dejo de las flores” me sentía nuevo y de cierta forma como un niño, era raro, pero delicioso, lo extrañaba.


Cenamos en Italliani's, Ariel su ensalada, Alex su lasaña, y yo mi pizza favorita.

domingo, 14 de febrero de 2010

Primera semana, segundo semestre.

Lunes: Phillipe strikes back, y ahora con una muleta como metralleta, “Lenguaje Visual” va a ser su única materia por este semestre; terminando su clase sigue “Arte y Tecnología” con Ponce de León, funcionando muy bien. Estas dos clases las comparto con Martha, Fred y la segunda con Roberto también. En la primera nos falta Roberto pero los sustituimos un poco o un nada con los compañeros de grupo del semestre pasado, como por ejemplo: con Oriel (jo jo jo, corrijo, muahahaha), con Giselle (Aries presente Chinga'o) y hmmm oh sí, el alacrán de los ojos verdes, Diego Omar, aunque según él prefiere que se le llame Zurdo :o. También se me olvidaba Chalito (Chalito es mi íntimo), con él, igual, comparto más de una clase y con casi todo su grupo del semestre pasado también.


Martes: Doña Maru Rabadán (ella sí Jo jo jo) instruyéndonos con su cultura y con “Cultura Visual”, demostrando aparte de un currículum muy ruidoso y lleno de nombres que ni conozco una gran falta de de cultura en videojuegos. Nada que no se pueda arreglar :P. Fred quedó encandilado con su belleza que combinada con su inteligencia, para él hacían buena mancuerna. Estudió en la ¡IBERO! (Me reservo el derecho de no delatar el por qué de mi exclamación). Paco Lastra, que en un principio detecté su acento divertido como cubano pero que la intervención de Roberto de decir que también podría ser de Acapulco me pareció muy chispa. Finalmente nos terminó por confirmar que es un hijo de Fidel y que en su matería aparte de ser como un dios para nosotros iba también a llamarse “Fundamentos de la Tridimensión” :o (suena pedorra [parafraseando a Edwin García]).

Tiene un ¡BAR! (El motivo de mi exclamación “en este caso” [parafraseando al Doc] suena muy obvia).


Miércoles: La luz, “Iluminación” (que es el nombre oficial). Larisa Escobedo :o, la onda, así de simple. Volvemos a estar en “P2” (parafraseando a Phillipe) “Pintura 2” un “bonito” lugar ubicado a un lado de los talleres de mantenimiento de la UAEM y confirmando de una vez por todas la falta de instalaciones que tiene nuestra “gran” facultad y adorada (parafraseando a La Veros Castro). Creo que Larisa es lesbiana pero de eso me dí cuanta muchas horas después de salir de su clase, empecé a atar cabos y finalmente creo que lo confirmé con algunos compañeros. Me gusta que así lo sea, creo que le añade otra visión a su enfoque como artista.


Jueves: Bermúdez/”Lenguaje Visual”, otro enfoque. Me gusta, aunque no el sarcasmo, pero, ¿cómo le sacas ese vicio a la gente?. Ni modo. Ésta clase fue de prueba , pero es probable que no lo sea, todo depende de si me es posible tomar las dos. Araceli Barbosa no fue y no tuvimos clases aunque hicimos (Fred y yo) que Martha viniera en vano :P.


Salí con Gonzalo, Fred y Roberto a buscar Flower Power por varias partes dentro y fuera de la universidad pero no encontramos y entonces planeamos ir a consumir alcohol a mi casa, pero, Fred y Roberto se desesperaron porque Ariel (uno de los vértices de mi triángulo) no llegaba del IBT para llevarnos a la casa así que sólo quedamos Gonzalo y yo, que también hicimos lo mismo porque ya que llegó Ariel nos dijo que se iba a tardar un rato más, así que tomamos la ruta 9 y fuimos a mi casa. Llegamos, me puse a cocinar, no sin antes tomar unos cocteles como aperitivo :P, y mientras platicábamos de un proyecto de este año, llegó Alex (el otro vértice que faltaba). No lo esperábamos hasta mañana, pero llegó :D. Gonzalo y yo ya encarrilados con el alcohol nos decidimos a ir a ver a “La Gorda” pero no podíamos ir sin saber antes si se presentaba o no, cuando en el momento se me ocurrió la idea de quién podría saber y fue, por supuesto, Iván.


Le llamé, me dijo, le dije, llegó y llegó con un alacrán: José María se llamaba :S, no me acuerdo ahora, pero sí me acuerdo de toda la noche que nos siguió después de que nos fuimos de mi casa y llegamos al bar. Tomamos, Gonzalo y yo más, bailamos, nos divertimos y cantamos con La Gorda, bailamos todavía más, me desafané de un borracho acosador del bar y nos fuimos a “jotear quejosamente” y a establecer y tatuar por cada ladrillo de palacio de gobierno de Cuernavaca el famoso “¡Amiga Wow! de Iván y José María mientras dábamos vueltas por todo el centro de la cuidad. Fuimos a parar de caminar hasta el Sanborn's del centro y ahí decídimos, después de dos ofrecimientos de sexo; uno cobrado y el otro pagado, que mejor sería irnos a dormir, Iván y José María por un lado y Gonzalo y yo por otro. Gonzalo esa noche se quedó a dormir en mi casa. Mientras yo en otro cuarto me iba a juntar con mis otros dos vértices y juntos en un tríángulo nos dormíamos.


Viernes: Alex me despierta diciendo que tiene que ir a DF de emergencia (trabajo) y que regresaba al rato, apenas y podía abrir los ojos y entender lo que me decía. Estaba mal, crudo. Todo ese día me sentí mal, dormí varias horas en la mañana, varias en la tarde y me acosté temprano para despertarme a las 5:30 de la mañana del sábado a jugar “The Force Unleashed”.